
Le Boudoir
Las delicadas notas que componen con destreza cada perfume recuerdan el arte de la Alta Costura. Envolverse en su aroma se convierte en un gesto personal que se resume en una memoria olfativa.
Originaria de Asia, la gardenia simboliza la unión entre dos personas. Además fue la flor más utilizada en los butonnieres de la década de los 20, una costumbre que comienza a ser retomada.
Perfume Gardenia, Chanel.
Collar de perlas, Chanel.
Broches, Lace and Lemons.
La flor de naranjo que predomina en su jugo anticipa momentos de profunda alegría. Sus notas vibrantes llenan el aire de frescura e irreverencia.
Perfume Beautiful Belle, Estée Lauder.
Anillo y collar, Pomellato.
Reloj, Bvlgari.
Tocado, Cristina Obregón.
Como un lienzo en blanco, los acordes de pera que se despliegan sobre el viento van envueltos por un aura floral que hace remembranza a los días soleados.
Perfume Bella Blanca, Oscar de la Renta.
Anillos, Bvlgari.
Tocado, Esther Omaña.
Vela aromática, Aerin.
Las facetas que la componen están regidas por iris, ámbar y benjuí. Una combinación que la convierte en suave y sutil con giros inesperados de hedonismo.
Eau de Parfum Intense, Tiffany & Co.
Tocado, Atelier Nupcial.
Pulsera, Pomellato.
El ensamble de violetas que forman sus notas de fondo están inspirados en el bouquet de novia de la reina Victoria. Sus acordes de salida de almizcle y sándalo le otorgan el carácter real que la caracteriza.
Perfume The Nupcial Bouquet, Atkinsons.
Vela aromática, Jo Malone.
Aretes, Bvlgari.
Considerado como uno de los perfumes más festivos de la casa francesa, sus notas nardo y flor de naranjo se remontan a las noches de verano en el Mediterráneo.
Perfume Amarige, Givenchy.
Anillos, Dodo.
Todas las flores: Moabi.
Fotografías: Víctor Trani.