El pelo fino es muy moldeable, sin embargo, la falta de volumen y la fragilidad es una gran desventaja. Cabe mencionar que esta condición se deriva por diferentes causas, entre ellas se encuentran los factores hereditarios, el consumo de algunos medicamentos, el estrés crónico, el clima, el uso de productos inapropiados o la realización constante de procedimientos agresivos, la falta de vitaminas y minerales, los cambios hormonales, etc. 

En su gran mayoría, las soluciones naturales suelen contrarrestar la caída y ayudan a fortalecer el pelo fino, pero, en realidad, la alimentación es fundamental. 

Trata de incluir proteínas en tu dieta, a través de alimentos como carne, huevos, pescado y queso. Si eres vegana, aumenta tu ingesta de granos y cereales. 

Además, trata de consumir grasas de origen vegetal, también aumenta tu ingesta de frutos secos, aguacate, aceite de girasol, de soya y de oliva, ya que son excelentes para fortalecer el pelo fino debido a que aportan ácido linoleico y vitaminas. 

Asegúrate de comer alimentos ricos en vitaminas A, B y C, ácido fólico, biotina y azufre, también, mantén una buena hidratación, debido a que es esencial para la regeneración.

Sin duda alguna, cambiar tus hábitos de vida es un factor primordial para mejorar tu salud. Aunado a esto, también es importante erradicar el estrés de tu estilo de vida, si tienes el pelo fino y sometes a tu cuerpo a situaciones de preocupación, es más vulnerable a la caída.   

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