Phoebe Philo, la diseñadora cuyo punto de vista cambió la percepción de lo que —debía ser— un atuendo femenino, y que reinventó la estética de la mujer contemporánea mientras estuvo al mando de la casa Céline (siempre con acento), regresa al atelier tras tres años sabáticos.

En esta ocasión, en su esperado regreso se verá liderando su propia firma, bajo el paraguas del grupo LVMH, el conglomerado de moda más grande del mundo.

Durante sus años en Céline, (aproximadamente una década), aunados a cinco años en Chloé, dejó muy clara su visión, sin olvidar su impecable confección, por lo que se puede especular que esta nueva línea de ropa y accesorios se realizará no solamente con la mejor calidad, sino bajo su indiscutible sello de absoluta sofisticación impreso en cada pieza.

Con un acuerdo en el cual se establece que la diseñadora es la socia mayoritaria, la firma estará basada en Londres, ciudad donde Philo reside. Por otro lado, se presume que la presentación y temporalidad de cada colección quedará a su discreción, promoviendo el movimiento “slow fashion”, mientras se aleja de la inmediatez y el consumo masivo.

A principios de esta semana Bernard Arnaud, director de LVMH, confirmó esta nueva alianza llamándola una “nueva aventura”, que convierte a Phoebe Philo en parte del gigante de la industria de lujo.

Dicho esto, no queda más que asumir que la propuesta de esta nueva casa de moda será completamente distinta a lo que se vio en Céline, misma que distaba de lo que se vio en la firma Chloé, mientras Philo estaba al mando.