Un nuevo capítulo para Loewe

Comienza una era en la historia de la marca española de perfumes y se pronostican aires de cambio cargados de arte y naturaleza,  la excelencia siempre presente en todos sus productos y aromas.

 

Si algo destaca a Loewe, es la excelencia presente tanto en la creación de sus bolsos, como de sus emblemáticas fragancias creadas por medio de los ingredientes naturales más puros.

A pesar de que todo comenzó en el año de 1846 en un taller artesano, no fue sino hasta 1972 que, con el lanzamiento de la primera esencia, se comienza a trazar un camino lleno de éxitos tanto en el ámbito masculino como femenino del mundo olfativo, por medio de la división Loewe Perfumes.

La marca logra resaltar sus valores fundamentales -espíritu innovador, artesanía pura y excelencia en los materiales- con la llegada de Jonathan Anderson como Director Creativo en 2014. Dos años después surge la primera expresión de una nueva imagen de marca: el diseño de un estuche novedoso, con imágenes botánicas del fallecido Karl Blossfeld, que acompaña el lanzamiento de la fragancia dual LOEWE 001.

 

Modernidad y artesanía marcan la pauta de un emocionante capítulo, el cual sintetiza los conceptos de naturaleza y piel por medio de la colaboración con ciertos artistas encargados de reinterpretar el arte natural característico de las fotografías de Blossfeldt.  

 

 

Este año el artista seleccionado es el fotógrafo Arno Rafael Minkkinen, quien busca develar una verdad mediante la unión de la naturaleza y la desnudez del cuerpo humano. Igual que Blossfeldt, lo que se aprecia en las obras del artista finlandés es la traducción de una belleza escondida y sincera detrás de las formas naturales.

 

 

La piel humana es protagonista en esta campaña que se lleva a cabo con Tenerife, España como escenario. Este elemento funciona como una forma de expresión alusiva a la sensualidad y atemporalidad, que transmite perfectamente las condiciones humanas; un ingrediente invisible y básico en cada una de las fragancias de la marca.

 

 

Una campaña llena de emotividad, sensaciones y naturaleza traducida en impecables fotografías en blanco y negro, que nos transportan a un mundo completamente nuevo con cada fragancia y donde las historias repletas de emociones, sin duda, nos roban el aliento.

 

Fotografías: Cortesía de la marca